Por cuestiones diversas mi preparación para la maratón de Barcelona 2015 no ha sido la más adecuada. De hecho, casi podríamos decir que no ha sido, simple y llanamente. He entrenado, he hecho alguna tirada larga, pero no he podido completar una preparación como otros años.
Comparando con el año pasado, cuando hice una preparación exhaustiva y de calidad (la mejor que he hecho nunca), los números me dejan en muy mal lugar.
2014 2015
Diciembre 340km 212km
Enero 331km 237km
Febrero 336km 167km (con parón de una semana incluido)
En 2014 cada semana entrenaba una media de entre 70 y 80km, incluyendo un par de picos de 101. Este 2015 todo ha cambiado y, curiosamente, la única semana en la que he conseguido hacer más de 70km fue la pasada.
El año pasado hice mi "maratest" (28km) en 1h53:21, o lo que es lo mismo, @4:02 el km
En 2015, la semana pasada conseguí sumar 28km en 2h11:09, @4:41.
(Cabe añadir que en 2014 hice un poco de "trampa", ya que hice el primer km de calentamiento y los últimos 3, de subida a casa, en casi 25 minutos, @6:11). Este año lo incluimos todo, por lo que hubiera bajado algo la media, pero no para tirar cohetes, claro.
Con el otro test de referencia, el conocido como "Test Gavela" o 2x6.000, no puedo comparar ya que el año pasado me salió mal a mí, pinché. En 2013, por ejemplo, fue de 24:00 (@4:00) y 22:18 (@3:43), y no me salió favorable (todo hay que decirlo).
La del otro día me salió bastante bien. El primer 6.000 en 27:26 - @4:35 y los siguentes 6km en 24:22 - @4:04. Eso me da una marca posible de 3h13 (yendo a un ritmo medio de 4:35) y una marca probable de 3h20 (@4:45). Firmo cualquiera de las dos.
El caso es que no voy sobrado de fuerzas ni de entrenos, pero mirando con perspectiva, los números me salen muy parecidos a los del 2011 (tengo datos de entreno de enero y febrero y me salen 237 y 240km de media).
¿Conclusión? Si acabo la maratón, me daré con un canto en los dientes y estaré más que satisfecho. Si no, será mi primer abandono, pero no será ninguna deshonra. Lo que no voy a hacer va a ser arrastarme por llegar a la meta. Si me veo en condiciones, haré los 42,195km. Si no, de vuelta a casa orgulloso de haberlo intentado.
Para abrir boca, esta semana me probaré en el primer 10.000 de este año (y desde hace muchos meses) en una prueba mítica para mí, la Cursa Popular de Caldetes, un clásico muy apetecible y con poca gente, familiar, para disfrutar del running en buena compañía.
Comparando con el año pasado, cuando hice una preparación exhaustiva y de calidad (la mejor que he hecho nunca), los números me dejan en muy mal lugar.
2014 2015
Diciembre 340km 212km
Enero 331km 237km
Febrero 336km 167km (con parón de una semana incluido)
En 2014 cada semana entrenaba una media de entre 70 y 80km, incluyendo un par de picos de 101. Este 2015 todo ha cambiado y, curiosamente, la única semana en la que he conseguido hacer más de 70km fue la pasada.
El año pasado hice mi "maratest" (28km) en 1h53:21, o lo que es lo mismo, @4:02 el km
En 2015, la semana pasada conseguí sumar 28km en 2h11:09, @4:41.
(Cabe añadir que en 2014 hice un poco de "trampa", ya que hice el primer km de calentamiento y los últimos 3, de subida a casa, en casi 25 minutos, @6:11). Este año lo incluimos todo, por lo que hubiera bajado algo la media, pero no para tirar cohetes, claro.
Test de 28km (con Endomondo me salen más, pero al mismo ritmo)
Con el otro test de referencia, el conocido como "Test Gavela" o 2x6.000, no puedo comparar ya que el año pasado me salió mal a mí, pinché. En 2013, por ejemplo, fue de 24:00 (@4:00) y 22:18 (@3:43), y no me salió favorable (todo hay que decirlo).
La del otro día me salió bastante bien. El primer 6.000 en 27:26 - @4:35 y los siguentes 6km en 24:22 - @4:04. Eso me da una marca posible de 3h13 (yendo a un ritmo medio de 4:35) y una marca probable de 3h20 (@4:45). Firmo cualquiera de las dos.
Entrenando en las pistas, a primera hora de la tarde, solo, todo un lujo.
El caso es que no voy sobrado de fuerzas ni de entrenos, pero mirando con perspectiva, los números me salen muy parecidos a los del 2011 (tengo datos de entreno de enero y febrero y me salen 237 y 240km de media).
¿Conclusión? Si acabo la maratón, me daré con un canto en los dientes y estaré más que satisfecho. Si no, será mi primer abandono, pero no será ninguna deshonra. Lo que no voy a hacer va a ser arrastarme por llegar a la meta. Si me veo en condiciones, haré los 42,195km. Si no, de vuelta a casa orgulloso de haberlo intentado.
Para abrir boca, esta semana me probaré en el primer 10.000 de este año (y desde hace muchos meses) en una prueba mítica para mí, la Cursa Popular de Caldetes, un clásico muy apetecible y con poca gente, familiar, para disfrutar del running en buena compañía.
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